Los americanos se dirigían al municipio de Castaños a un funeral
Regados entre el monte terminaron cinco integrantes de una familia del estado de Texas, cuando se dirigían al funeral de un familiar en Castaños y volcaron aparatosamente en la camioneta que viajaban la noche de ayer.
“Nos levantamos muy temprano, pues teníamos planeado acudir al entierro de mi cuñado, preparamos todo desayunamos y abordamos el vehículo donde iniciamos nuestro camino desde Kyle Texas, lugar donde radicamos, sobre el camino observé muchas cruces que se encontraban localizadas a los costados de la carretera, eso me puso muy nerviosa ya que yo venía conduciendo, el pensamiento de que algo nos pudiera pasar nunca abandonó mi cabeza y les dije a todos pónganse los cinturones de seguridad, bendito Dios así lo hicieron pues mi intuición no falló al sufrir este accidente”, así lo dijo Doña Lucy quien perdió el control del volante a la altura del kilómetro 157 de la carretera federal número 57, poco antes de llegar al tramo conocido como Los Menonitas.
El accidente tuvo lugar cerca de las 23:30 horas, cuando se desplazaba una camioneta marca Dodge color gris con placas del estado de Texas con dirección al sur, donde viajaban 5 personas cuatro de ellas mujeres y solo un hombre, según versión de la conductora el percance sobrevino al pasar por un enorme hoyo que se encontraba sobre el asfalto, el cual debido la oscuridad que prevalecía en ese lugar no logró ver y se salió de la carretera para la terracería, donde l intentó incorporarse empezó a dar varias vueltas de campana, terminando al final con los neumáticos hacia arriba entre el monte el vehículo, donde viajaban Casandra de 17 años de edad, Austin de 18 años de edad, Priscila de 19 años de edad, Cinthia de 42 años de edad y la conductora Lucy de 62 años de edad, quienes se dirigían al entierro de José Reyna, mismo que falleció en Castaños.
El ángel de la guarda nunca los abandonó y los protegió durante su camino, pues todos los ocupantes de la camioneta, resultaron con lesiones que no pusieron en riesgo su vida e incluso ninguno fue trasladado a un hospital, solamente fueron atendidos en el lugar por socorristas del GUBC, Águilas Doradas y del Heroico cuerpo de Bomberos.
Elementos de la Policía División Caminos, realizaron las diligencias pertinentes, ordenando el traslado de lo que quedó del automóvil a una pensión federal, mientras familiares de los lesionados, que previamente habían sido enterados por teléfono del accidente acudieron para brindar el apoyo, donde al final lograron reiniciar su camino y pudieron estar a la hora de sepultar a su familiar.
