Son 78 los productores dedicado a la agricultura, la siembra calabacita y maíz, sorgo forrajero, su esfuerzo se ve compensado al comercializar sus productos. Cada productor tiene de 7 a 8 hectáreas de tierra fértil
NADADORES, COAH. -Ubicado sobre el kilómetro 34 de la Carretera Federal Nadadores-Cuatro Ciénegas, el Ejido San José del Águila es una de las comunidades rurales más pobladas del municipio de Nadadores; en esta comunidad la siembra de diversos productos, es la principal actividad de sobrevivencia en las familias.
En los hogares se vive de manera tranquila, los hombres y mujeres desde temprana hora empiezan su jornada del día. Apenas amanece, y los campesinos salen a preparar la tierra para su siembra o bien regar la cosecha para obtener los mejores frutos.
Fundado en el año de 1962, el Ejido El Águila se encuentra a una distancia de 7.5 kilómetros de la cabecera municipal, cuenta con una población de cerca de 350 habitantes; en este poblado también salen a trabajar a industrias de la región, pero sin dejar a un lado sus jornadas en el campo.
Aquí las familias son solidarias, si hay una festividad todos se reúnen, como lo hacen durante el aniversario del ejido que se celebra el 24 de octubre, este día toda la comunidad se congrega para una gran fiesta.
Son 78 los productores dedicado a la agricultura, la siembra calabacita y maíz, sorgo forrajero, su esfuerzo se ve compensado al comercializar sus productos. Cada productor tiene de 7 a 8 hectáreas de tierra fértil.
Juan Andrés Delgado Rodríguez del consejo de vigilancia del ejido, señaló que lo que siembran lo comercializan en Monclova y Frontera “algunos tienen la cosecha al día, no en grandes cantidades, pero nos sirve para sobrevivir”.
Actualmente son pocos los ejidatarios de la comunidad que viven de la actividad ganadera, son 8 las personas que se dedican a la crianza de ganado caprino y bovino.
Este 2020, San José del Águila celebrará su 58 aniversario, pero es fecha que las familias carecen de servicios como drenaje y pavimentación, cuentan solamente con el servicio de luz que se instaló en el año de 1974 y el agua en el año de 1978.
SUBSISTIENDO AL DÍA
Sin contar con servicios de tecnología que en la actualidad se han vuelto una prioridad para gran parte de la población; familias del Ejido San José del Águila subsisten en su hogar, donde lejos de lamentarse viven tranquilos.
Es el caso de la familia Guerrero, donde María Concepción vive con sus padres, sus hijos y su esposo Manuel de Jesús; desde hace 20 años se dedica a vender gorditas, sopes y quesadillas.
En su hogar, la comida la preparan a la leña y de lo mismo que producen en la siembra calabaza, maíz, acelga y otros productos, es de donde la familia se alimenta.
Mientras preparaba el maíz y luego elaboraba las tortillas, María Concepción detalló que vivir en la zona rural es “bonito”; aunque se batalla a veces para salir adelante, se vive mejor y sin menos riesgos que en la ciudad.
“El pueblo es tranquilo, aquí disfrutamos de la tranquilidad con lo poco que tenemos, en las mañanas nos levantamos molemos el maíz, después torteamos, hacemos nuestra comida a la leña”.
Los domingos se dedica a la venta de gorditas, sopes y quesadillas, y de las jornadas diarias que su esposo hace en el campo sale el sustento para su hogar.
“Aunque ahora con lo de la pandemia del Covid, no nos ha ido muy bien, tenemos nuestro puesto a la orilla del ferrocarril, pero ya es muy poca gente la que viene”, agregó CONTINUARA….
