Asunción, 28 julio.
La primera dama de Paraguay, Silvana López Moreira, se estrenará como presentadora televisiva en un programa de apoyo a los emprendedores en tiempos de COVID-19, que iniciará cocinando un plato típico en Mburuvicha Róga, la residencia presidencial que comparte con su marido, Mario Abdo Benítez.
La receta que elaborará es hasta el momento una sorpresa que se desvelará el martes, en el primer capítulo de "Aikuaa" (Saber, en idioma guaraní), el programa que se emitirá en la estatal Paraguay TV, además de en las redes sociales, informó este martes la Oficina de la Primera Dama.
En el resto de los programas, se alternará la presentación de la primera dama con la de los emprendedores invitados, de gremios como el hogar, cocina, nutrición, huerta, jardinería, educación y artesanía.
La primera dama anunció en un vídeo promocional que el programa televisivo busca "apoyar a las personas que debido a este difícil momento" tuvieron que "reinventarse con mucha creatividad y esperanza".
El espacio televisivo es una expansión del Programa "Aikuaa", un proyecto de la Oficina de la Primera Dama que arrancó en junio del año pasado y basado en la educación financiera y la elaboración de productos de limpieza/desinfección para mujeres en situación de vulnerabilidad.
Procedente de una familia de clase alta, López Moreira se convirtió en primera dama de Paraguay tras la investidura de Abdo Benítez, del conservador Partido Colorado, en agosto de 2018.
Los medios locales publicaron la semana pasada que López Moreira y su familia crearon empresas off-shore en Panamá y Estados Unidos. Pese a no ser una actividad ilegal, el Frente Guasu, la mayor formación de izquierda de Paraguay, criticó al día siguiente el "valor simbólico" de ese proceder.
Así, la senadora del Frente Guasu Esperanza Martínez expresó en la Cámara Alta que "es muy fuerte el mensaje sobre la confianza en el futuro del Paraguay, cuando las empresas de la familia del presidente puedan ser utilizadas para sacar dinero del país".
Martínez recordó además que la familia de Abdo Benítez se benefició con "negocios espurios" durante la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989), de quien el padre del mandatario era secretario privado.
