El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este martes la disolución del grupo Cheikh Yassine, fundado por uno de los detenidos por el atentado islamista del pasado viernes, y conocido por sus postulados extremistas.
Macron, en una breve intervención tras visitar el departamento más conflictivo de Francia (Seine-Saint-Denis, en la periferia de París), avanzó que el Consejo de Ministros de mañana, miércoles, aprobará la disolución de ese colectivo.
El presidente insistió en que las acciones de la justicia y las fuerzas de seguridad tras el atentado "se intensificarán" contra asociaciones e individuos "que promueven un proyecto integrista radical".
Hay en marcha "una estrategia", recalcó Macron, quien subrayó que "nuestros conciudadanos tienen que estar protegidos" y señaló que también aquellos "de religión musulmana deben ser defendidos del islamismo radical".
Cheikh Yassine fue fundada en 2004 como una organización a favor de los palestinos y toma su nombre del fundador de Hamás, Ahmed Yasín, asesinado por Israel ese mismo año.
Sin embargo, actualmente es más conocida en Francia por su retórica antisemita e islamista.
Su fundador es Abdelhakim Sefrioui, uno de los 16 detenidos por la decapitación del profesor Samuel Paty, quien había mostrado caricaturas de Mahoma en una clase de educación secundaria sobre libertad de expresión.
Sefrioui acudió junto con el padre de una alumna de Paty a exigir a la directora del instituto que despidieran al profesor.
Posteriormente divulgó en redes sociales un vídeo en el que aparece entrevistando a una supuesta alumna sobre qué ocurrió con las caricaturas -aunque está falsificado, porque la adolescente no acudía a esa clase-, antes de pedir represalias contra ese "bandido".
Además, Sefrioui y sus seguidores habían organizado protestas y movimientos de acoso, incluyendo amenazas personales, contra imanes de mezquitas a los que consideran demasiado blandos para sus postulados y acosan para que dejen el puesto.
