CIUDAD DE MÉXICO.- Con reducción de jornadas laborales, baja de sueldos, despidos y con cierre de operaciones, las planchadurías, tintorerías, lavanderías industriales y las de encargo tratan de "sobrevivir".
La presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Lavanderías (Canalava), Sandra Cardozo, explicó que los clientes de lavanderías por encargo y de autoservicio cerraron, las tintorerías registran una disminución "significativa" de operaciones.
Mientras que las planchadurías tienen una actividad casi nula, lo que afecta fuertemente a muchos negocios familiares o de autoempleo quienes ya cerraron casi en su totalidad, dijo durante la videoconferencia que organizó la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
Cardozo expuso que la situación es muy difícil porque la caída en ventas fue de 85% y en empleos en 80% en lavanderías industriales; en lavanderías por encargo y autoservicio cayeron 85% las ventas y 80% los empleos.
En tintorerías las ventas bajaron en 90% y los empleos se redujeron en 80%, mientras que las planchadurías, que prácticamente son autoempleos, las ventas se redujeron en 95%, es decir solamente tienen ventas de 5% de lo que usualmente tenían, lo que las llevó a reducir en 90% los empleos.
Comentó que esta industria genera 187 mil 200 empleos, a través de 40 mil 327 tintorerías y lavanderías de las cuales 40 mil 27 son microempresas; es decir el 99.26% del total; 276 son pequeñas; solamente 23 medianas y una es grande al dar más de 251 empleos.
