El Presidente dijo que se debe respetar la ley y no hacer maniobras por cargos.
A contracorriente de la señal del presidente Andrés Manuel López Obrador, un bloque de legisladores de Morena y del PT se radicalizó y se abstuvo de votar o lo hizo en contra para impedir que la priista Dulce María Sauri Riancho pudiera ser electa como presidenta de la Cámara de Diputados para el tercer año de la 64 Legislatura.
Ante la disputa que sostenían el PRI y el PT por la presidencia de San Lázaro, en la que sumaron a legisladores de otras bancadas para agrandar su fracción, este lunes por la mañana el Presidente dijo que se debe respetar la ley y no hacer maniobras por cargos, por lo que de inmediato Morena manifestó su respaldo al acuerdo que daba la Mesa al tricolor.
Pero al llevar el pacto alcanzado por la Junta de Coordinación Política al pleno, la planilla que encabezaba Sauri se quedó a 25 votos de alcanzar la mayoría calificada y ser aprobada, pues solamente obtuvo 278 a favor, 64 abstenciones y 112 en contra.
Ante este escenario, la Cámara de Diputados no se paralizará y la panista Laura Rojas permanecerá en su cargo hasta el 5 de septiembre. Hoy martes instalará la sesión de Congreso General y recibirá el Segundo Informe de Gobierno.
