Más de dos millones de niños volvieron a las aulas este martes en Jordania con mascarillas y cumpliendo los requisitos de distanciamiento social, después de una interrupción escolar de más de cinco meses como consecuencia de la pandemia y en medio de un repunte de casos de coronavirus.
Más de 4,000 escuelas, que cerraron el pasado 21 de marzo en el marco del toque de queda total impuesto en el país árabe para evitar la propagación de la COVID-19, reabrieron hoy con estrictas medidas preventivas y en medio de un repunte de casos en el país, que ayer superó la cifra de 2,000 contagios acumulados.
Para esta atípica vuelta al cole, el Gobierno jordano ha establecido que todos los niños mayores de 6 años lleven siempre puesta la mascarilla, mientras que los estudiantes deberán mantener una distancia entre sí de un metro y medio dentro de las aulas y de 2 metros en el recreo y fuera de las clases.
En caso de que no haya suficiente espacio dentro de las aulas de algunas escuelas, las clases se impartirán en dos turnos: la mitad de los estudiantes asistirá al centro educativo durante los tres primeros días de la semana y, la otra mitad irá en los dos últimos.
Asimismo, los comedores de los colegios permanecerán cerrados y se han suspendido las actividades deportivas y culturales, mientras que el Gobierno ha pedido a las familias que se abstengan de llevar a sus hijos al colegio si estos padecen enfermedades como asma o diabetes.
El Ejecutivo ya anunció anteriormente que cuando los estudiantes volvieran a la escuela se emplearía un método combinado de enseñanza que combinaría la asistencia presencial y el aprendizaje online.
La vuelta al cole en Jordania se ha producido en un momento en el que el país está registrando las cifras más altas de nuevos contagios desde el estallido de la pandemia.
Ayer se registraron 63 nuevos casos de COVID-19, que elevaron la cifra total a 2,034 contagios y 15 muertes en un país de apenas 10 millones de habitantes, según el Ministerio de Salud de Jordania.
