Doce civiles resultaron heridos este miércoles en un ataque insurgente, dirigido en principio contra un puesto de las fuerzas de seguridad, en el sur de la Cachemira india, informaron fuentes policiales.
"Los insurgentes lanzaron una granada contra un búnker de las fuerzas (de seguridad) en Kakapora, que falló su objetivo y explotó en la vía pública hiriendo a doce civiles", dijo la Policía cachemir en un breve comunicado.
Por el momento, ningún grupo insurgente se ha atribuido la autoría del ataque.
El suceso se produjo mientras las autoridades locales preparan las primeras elecciones desde que en agosto del año pasado el Gobierno indio retiró su estatuto de relativa autonomía, dividiendo el antiguo Estado en dos territorios controlados directamente desde Nueva Delhi.
Las elecciones para organismos locales a nivel de distrito tendrán lugar a partir del 28 de noviembre en ocho fases.
La Cachemira administrada por la India lleva tres décadas asistiendo a una rebelión armada de carácter independentista, calificada como terrorista por Nueva Delhi, en la que han muerto decenas de miles de personas desde 1989, la mayoría civiles.
Pakistán disputa a la India la soberanía de la región desde la partición del subcontinente indio en 1947, tras la descolonización británica, y por ella han librado tres guerras y numerosos enfrentamientos de menor entidad.
En el último incidente de relevancia entre ambas potencias nucleares, al menos doce personas murieron y treinta resultaron heridas en un intercambio de fuego cruzado en la Línea de Control (LoC, en inglés, la frontera de facto que separa a ambos países en la disputada región de Cachemira.
La India y Pakistán se acusaron mutuamente de haber comenzado las hostilidades en un clima tenso tras la decisión de Nueva Delhi de revocar en agosto del año pasado el estatus especial de Cachemira.
