Grito de Independencia online
Dentro de dos semanas se celebra un año más de la Independencia de México, festividad mexicana que habitualmente reúne a miles de familias en festejos ya sea en casa, salones o la presidencia municipal de su localidad.
Es habitual la coordinación entre los asistentes a la hora de llevar antojitos para improvisar un bufet que pronto degustarán en la tradicional noche mexicana.
Para hacer pachangas, los mexicanos nos pintamos solos y año con año el grito de ‘¡Viva México!’ resuena con las respectivas campanadas que lo acompañan; igual resuenan los choques de botellas por los brindis que a lo largo y ancho del país se celebran.
Este año, por lo menos en Monclova, las cosas serán diferentes: a través de un comunicado, el Alcalde Alfredo Paredes anunció que el Grito de Independencia se llevará a cabo vía online a través de las redes sociales del municipio.
Lo anterior con la finalidad de evitar conglomeraciones en la explanada de la presidencia y así prevenir contagios de coronavirus innecesarios.
Así mismo, los fuegos artificiales que tanto llaman la atención a nuestros pequeños, esta vez serán disparados desde distintos puntos de la ciudad a fin de que todos podamos disfrutar de este espectáculo visual.
Y es aquí donde surge la duda: ¿como ciudadanos tomaremos las medidas necesarias para evitar contagios entre nuestro círculo social y familiar?
La realidad de las cosas es que en las últimas semanas se nos ha visto más relajados de lo habitual, bajando la guardia, asistiendo a reuniones y olvidando las medidas de precaución a las que ya estamos acostumbrados.
Tal parece que la psicosis colectiva en la que nos vimos inmersos ha perdido bastante poder sobre nuestros actos y me parece que no está del todo mal.
Si bien es cierto que la propagación del virus SARS-CoV-2 aún es latente y que es una realidad a la que nos hemos estado acostumbrando en estos meses, las actividades deben seguir su curso con las medidas necesarias.
El estar imaginando los rasgos de las personas con las que se trata por el uso del cubrebocas ya es algo a lo que nos habituamos; el ponerse gel antibacterial al entrar a los establecimientos ya nos parece de lo más natural del mundo.
El miedo de salir de casa poco a poco ha disminuido para poder realizar nuestras actividades esenciales, como lo son el ir a nuestro lugar de trabajo, hacer el súper, realizar pagos de servicios, entre un largo etcétera.
Es decir, que no está del todo mal que la paranoia nos esté dejando de afectar, pero tampoco significa que debamos ser inconscientes a la hora de organizar reuniones.
Me parece que podemos vivir un año sin antojitos mexicanos, al fin que no necesitamos que sea 16 de Septiembre para organizar un festival de la gastronomía en nuestros hogares.
Hoy más que nunca hemos avanzado lo suficiente, al grado de volver un poco a nuestras actividades de manera gradual; no lo echemos por la borda.
Las guarderías ya abrieron a cierto grado de capacidad, las escuelas están pensando en sistemas híbridos entre presenciales y virtuales, los centros de trabajo poco a poco vuelven a sus actividades normales y todo esto es gracias a la prudencia que como ciudadanos hemos tenido hasta el momento.
Este 16 de Septiembre demos un grito orgulloso desde nuestras casas, desde nuestra trinchera. Disfrutemos desde el patio del hogar la pirotecnia que desde siempre ha hecho brillar los cielos majestuosamente.
El año que entra (ojalá) podamos desquitarnos.
Por lo pronto: ¡Viva México!
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