La Cruz Roja de Nicaragua informó este miércoles que necesita unos 3.2 millones de dólares para llevar a cabo sus labores en el marco de la emergencia causada por el paso del huracán Eta, que impactó al país con la fuerza de un huracán "extremadamente peligroso" el pasado día 3.
Nicaragua, donde dos millones de sus 6,465,513 habitantes estuvieron expuestos a los efectos de Eta, necesita ayuda para 64 comunidades afectadas, donde murieron tres personas y cuatro están desaparecidas.
Además, cerca de 71,000 fueron evacuadas, 47,000 necesitaron refugio, 47,690 quedaron sin agua potable, 1,800 casas fueron destruidas, 24,600 sin electricidad, y 900 kilómetros de carretera resultaron cortados, según un informe de la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Cruz Roja Nicaragüense.
El presidente de esta última entidad, Oscar Gutiérrez, afirmó que las necesidades económicas están centradas en cubrir la atención en salud, apoyo emocional, brindar agua y saneamiento, comunicación, rendición de cuentas, reparación de repetidoras en el Caribe, restablecimiento de contactos familiares y fortalecimiento de capacidades, para lo cual están listos 500 voluntarios y 65 ambulancias.
Gutiérrez sostuvo que, por un acuerdo con las autoridades nacionales, la Cruz Roja Nicaragüense se hará cargo del apoyo humanitario a los municipios de Bonanza, Prinzapolka y Waspam (noreste), tres de los más afectados por Eta, y cooperará con la asistencia en el departamento de Rivas (suroeste).
Hasta ahora la Cruz Roja ha entregado en Nicaragua 1,500 paquetes alimenticios, que incluyen materiales de higiene, cocina y alimentación, ha brindado el servicio de contactos familiares, apoyo psicosocial, de agua y saneamiento, búsqueda y rescate, puso a disposición una planta de tratamiento de agua en Prinzapolka, y asistencia para enfrentar la pandemia de la covid-19.
