Comienzan las consultas sobre la transición en Mali tras el golpe de Estado
Las consultas nacionales sobre el proceso de transición en Mali, organizadas por la junta militar que tomó el poder tras el golpe de Estado del 18 de agosto, comenzaron hoy en medio de una gran movilización política y social.
Representantes de los partidos políticos, ONG, grupos rebeldes, agrupamientos sindicales y profesionales, así como diferentes medios de comunicación acudieron hoy al Centro Internacional de Conferencias de Bamako convocados por el Comité Nacional para la Salvación del Pueblo (CNSP, órgano militar que dirigió el golpe).
También acudieron a la cita los miembros del colectivo opositor Movimiento 5 de Junio (M5-RFP), uno de los actores políticos clave en la lucha contra el régimen anterior, que apoyó abiertamente el golpe contra el antiguo presidente, Ibrahim Boubacar Keita.
Las delegaciones de los diferentes grupos participantes llegaron al centro de conferencias en medio de estrictas medidas de seguridad y fueron saludados por cientos de personas que se congregaron en el lugar mientras enarbolaban fotos de los militares golpistas y coreaban consignas de apoyo a la junta militar.
El encuentro fue marcado por momentos de tensión tras las protestas de algunos grupos dentro de la sala que criticaban problemas organizativos o denunciaban ser excluidos del debate.
Esta primera jornada de encuentros preliminares, que durará el fin de semana, se celebra en Bamako y paralelamente en el resto de las capitales de las regiones del país
Los participantes formaron cinco talleres de trabajo temáticos para definir la arquitectura, órganos y duración de la transición, así como estudiar las propuestas de la comunidad internacional y de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), que exige a los militares una transición de corta duración encabezada por civiles.
En su intervención en la ceremonia de apertura de las consultas de hoy, el vicepresidente del CNSP, Malick Diaw, subrayó que el objetivo de la junta militar es "contribuir en la reconstrucción" del país, al mismo tiempo que pidió la participación de todos los malienses en el proceso de transición.
"El tiempo apremia, hay que ir rápido, pero seguro. Es en esta lógica que el CNSP tomó la iniciativa de organizar este encuentro para aprobar los términos de referencia (de la transición)", aseveró Diaw, que en ningún momento manifestó la concepción de los militares sobre la próxima transición.
Las concertaciones de este fin de semana constituyen una primera etapa, que será seguida de otras consultas a partir del próximo de 10 de septiembre con la participación de representantes de las regiones del país y de la diáspora maliense.
Todos los grupos invitados por la junta militar acudieron a la cita de hoy con la excepción de la Coordinadora de Movimientos del Azawad (CMA) -que representa a la mayoría de los insurgentes separatistas tuareg, una de las partes firmantes del acuerdo de paz intermaliense firmado en 2015-, que manifestó reticencias en el último momento.
Además de la inestabilidad política, Mali sufre enfrentamientos intercomunitarios y frecuentes ataques yihadistas en extensas zonas en el norte y centro del país, que escapan al control estatal.
Diez soldados malienses murieron el jueves en una emboscada tendida por desconocidos en un pueblo en la región de Kulikoró, fronteriza con Mauritania.
Se trata del tercer ataque mortífero contra el ejército maliense desde el golpe de Estado del 18 de agosto.
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