Sobre todo en el Maratón de Nueva York
El maratonista mexicano Andrés Espinosa dejó huella tanto en la maratón de Nueva York como de Berlín, ambos cancelados esta semana con motivo de la pandemia de COVID-19, y así como su entrenador Rodolfo Gómez, coincidió en señalar que habría sido una osadía celebrarlo en estos tiempos impredecibles.
“Se han suspendido grandes eventos, Nueva York y Berlín, no podían ser la excepción porque ahora sigue fuerte la pandemia, yo creo que hubiese sido irresponsable por parte de los organizadores, hay mucho en juego, pero tampoco iban a exponer a los competidores, fue una buena decisión que lo suspendieran”, afirmó el corredor que participó en cuatro ocasiones en Nueva York.
Andrés Espinosa en la actualidad vive en Querétaro, supo invertir lo que ganó como maratonista profesional para no padecer carencias, a sus cuatro hijos les dio una carrera profesional, ninguno se dedicó al deporte de alto rendimiento. La maratón de Nueva York es el más simbólico y le cambió la vida.
“En 1991 y 1992 ocupé el segundo lugar, venía de un año y medio atrás de ser obrero en Altos Hornos de México, entonces el ganar Nueva York me cambió la vida, porque la fama me llegó de golpe, pero gracias a Dios supe sortear el camino”, declaró el atleta de 57 años.
En 1991, Andrés comentó que era prácticamente un desconocido a pesar de que ya le había ganado en Coatzacoalcos en ese mismo año a Salvador García en esa ocasión no le habrían ganado, “cuando decidió jalar imprimió un paso impresionante, decidió ir atrás de él, pero nunca se dio por vencido. El “Halcón” se convirtió en el primer mexicano en ganarlo.
Al año siguiente regresó a tratar de ganar Nueva York, pero al final fue superado por el sudafricano Willy Motolo, “esos dos maratones me dejaron una gran experiencia y cuando regresó en el 93 el entrenador me dice que ya era el mío, ahora con todo y gracias a dios lo ganamos, hicimos una muy buena preparación y esa se vio reflejada con mi triunfo”.
Todavía participó en una cuarta ocasión en 1996, el de mejor nivel que se tenía hasta entonces, en esa ocasión concluyó en el quinto sitio ganándoles a corredores de la talla del campeón mundial, el español Martin Fitz.
En el 1994, el coahuilense corrió la maratón de Berlín en la categoría de más de 40 años con tiempo de 2:08:48, después de casi 10 años de haber establecido la marca mexicana en Boston de 2:07:19. Berlín para él fue la culminación de su carrera deportiva, “el querer dejar algo escrito para la historia”.
