La operación habría sido dirigida por Peña Nieto y por su secretario de Hacienda, Luis Videgaray
CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio crédito este viernes a las revelaciones hechas por el exdirector de Pemex Emilio Lozoya, según el cual el Gobierno anterior sobornó a legisladores para aprobar sus reformas.
"Es muy lamentable lo que se está dando a conocer a partir de la detención y extradición del señor Lozoya", expresó el mandatario en rueda de prensa desde Oaxaca, en el sur del país.
López Obrador, del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena), aseveró que gracias a las confesiones de Lozoya, extraditado la semana pasada desde España, se "está sabiendo que hubo sobornos" en la Administración pasada.
El periódico Reforma publicó este viernes que Emilio Lozoya habría confesado que pagó entre 2013 y 2014 sobornos por 52.4 millones de pesos (unos 2.3 millones de dólares) a legisladores del Partido Acción Nacional (PAN) para que apoyaran las reformas del Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018), del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
La operación de los sobornos habría sido dirigida por Peña Nieto y por su secretario de Hacienda, Luis Videgaray, que habrían sobornado al líder del PAN Ricardo Anaya con 6.8 millones de pesos (unos 300,000 dólares).
"Ahora que Lozoya está dando a conocer que hubo estos sobornos y que se puso dinero para aprobar la reforma energética y se repartió dinero a legisladores de partidos, sería muy importante terminar de conocer cuánto y a quiénes (se les entregó dinero)", expresó López Obrador.
El presidente defendió que "todos los mexicanos tienen que saber qué sucedió con este asunto" y pidió que "se busque un modo que permita informar al pueblo".
"Qué bien que la Fiscalía tomó la decisión de otorgarle al señor Lozoya esta posibilidad de acogerse al procedimiento legal de testigo protegido porque necesitamos saber toda la verdad", celebró.
Además, pidió que "se llame a declarar a todos los implicados" y que sean denunciados "públicamente" para así "seguir estigmatizando la corrupción" en México.
Lozoya, que formó parte de la campaña electoral de Peña Nieto y luego fue director de Pemex bajo su Gobierno, está acusado de recibir 10,5 millones de dólares en sobornos de Odebrecht y participar en un fraude de 280 millones de dólares por la compraventa de una planta de fertilizantes.
El exidrector de Pemex fue capturado el pasado 12 de febrero en España y extraditado el pasado 17 de julio a México tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía mexicana para destapar la corrupción durante la administración de Peña Nieto.
Al llegar a México, Lozoya fue trasladado a un hospital por anemia.
