Son tiempos de coronavirus y las Águilas procuran otros cuidados sobre el trabajo de cancha, como la separación en dos bloques, con grupos de seis jugadores.
Con una dosis de gel antibacterial en las manos y la medición de temperatura fueron recibidos los jugadores del América en su segundo día de entrenamiento en el club.
Los primeros en arribar a las instalaciones de Coapa fueron Leonardo Suárez, Sebastián Córdova, Federico Viñas, Henry Martín, Andrés Ibargüen, Paul Aguilar y Guillermo Ochoa, otra vez con el entusiasmo por pisar el césped y alistar la pretemporada rumbo al Apertura 2020.
Son tiempos de coronavirus y las Águilas procuran otros cuidados sobre el trabajo de cancha, como la separación en dos bloques, con grupos de seis jugadores.
Mientras, el cuerpo técnico, que encabeza Miguel Herrera, supervisa y dirige el entrenamiento con cubre bocas. La orden en la institución es la de acceso sólo al personal que sea importante para la operación del entrenamiento.
Por ahora, las ausencias más significativas en el conjunto azulcrema son Renato Ibarra -separado del grupo desde marzo pasado-, y Nico Castillo.
El futuro de Ibarra es incierto, debido al pleito familiar con su expareja Lucely Chalá y que derivó en acusaciones de presunta "tentativa de feminicidio y de aborto", aunque al final todo quedó en medida cautelar de "violencia familiar".
Sobre el chileno Castillo y el colombiano Benedetti, ambos trabajan en sus respectivas rehabilitaciones y no hay fecha para su vuelta, aunque el cafetero acudió ayer sólo por un breve tiempo.
Después de dos rondas de pruebas Covid-19 y los exámenes médicos de rigor, en el Nido no hay reportes de futbolistas contagiados.
