National Center for Climate Restoration de Australia afirma que en el 2050 el calentamiento global podría superar los tres grados centígrados, llevando al colapso de la Tierra y de la humanidad.VANGUARDIA/EL TIEMPO
Una investigación del National Center for Climate Restoration de Australia afirma que en el 2050 el calentamiento global podría superar los tres grados centígrados, llevando al colapso de la Tierra y de la humanidad.
El 2050 será el inicio del fin. La Tierra está destinada a colapsar por culpa del cambio climático y lo hará antes de cuanto podemos imaginar.
Esté es el resultado de un estudio del National Center for Climate Restoration de Melbourne, dentro de treinta años los ecosistemas terrestres se hundirán, desde el Ártico a la Amazonia a la Barrera coralina.
El cuadro es preocupante: el 35% de la superficie terrestre, donde vive el 55% de la población mundial, podría ser invadida por al menos veinte días al año de terribles ondas de calor; el 30% de la superficie terrestre podría ser destinada a volverse árida; las zonas del Mediterráneo, de Asia occidental, Medio Oriente, del suroeste de Estados Unidos y de Australia podría volverse inhabitable; la escasez de agua terminaría por afligir a dos mil millones de personas y la agricultura mundial implotaría.
Todo esto podría con llevar con mil millones de prófugos climáticos.
Los científicos creen que guerras y carestías podrían llevar al final de la humanidad. Los climatólogos han calculado que, en el 2050, debería verificarse un fatal alzamiento de la temperatura global que iría a los 3 grados centígrados.
En el reporte Breakthrough National Center for Climate Restoration se afirma por ejemplo, que ciudades densamente pobladas como Mumbai, Yakarta, Bangkok y Manila serían abandonadas por el aumento del nivel del mar y por las difíciles condiciones climáticas que se crearían.
La hipótesis de los científicos es que existen riesgos de calentamiento global no tomados correctamente en los Acuerdos de París. Los Acuerdos, de hecho, han previsto un aumento de 3 grados en el 2100, sin tener en cuenta el proceso de “long term carbon feedback”, para los cuales la Tierra tiende a amplificar los cambios climáticos en negativo, acelerando los tiempos de calentamiento global.
