ANÁLISIS A TIEMPO

Hay un Alcalde de la Región Centro que por cierto no habla mucho y no es presuntuoso, sin hablar de más, sereno y calladito va avanzando sin hacer tanto alarde como otros.

No tiene necesidades de muchos reflectores, ni se le ha visto bailando de forma ridícula en los eventos.

No lo andan cuidando escoltas, ni se conduce en una camioneta blindada como si fuera el último refresco del desierto.

No destaca su municipio como si fuera el mejor de la Región Centro, porque en definitiva sería un mentiroso de primera.

No le reclaman sus ciudadanos por redes sociales, no lo acusan de ladrón como a otros.

Tampoco lo han quemado en redes sociales, acusándolo de haber adquirido propiedades de varias hectáreas con valor de varios millones de pesos.

Mucho menos su familia ejecuta obras municipales escondidos en diferente razón social o con compañías subcontratadas.

No le gana la ambición y mucho menos se cree el rey del mundo.

Su nombre Enrique y de apellido Soto.

Comanda el municipio de Castaños y en poco tiempo ha avanzado mucho y favorablemente.

Vino a darle la lección de su vida al nefasto de Isabel Sepúlveda que no le bastaron 7 años de administración pública que le pasaron de noche.

Fue dos veces alcalde, una de tres años y la última de 4, en los cuales no hizo nada a excepción de llevarse el pastel completo, teniendo a toda su familia en la nómina municipal.

Se olvidó del pueblo y le valieron “puritita” ingrata las obras, dejándole de importar el municipio, que al cabo rancho siempre ha sido.

Pero llegó Soto, y le cambió la cara a Castaños, tanto así que hasta se ha dado a conocer que construirán su propio parque industrial, pequeño, pero con 6 naves con una inversión inicial de 5 millones de dólares.

Fue un empresario local el que se aventó y Soto calladito y decir nada, ya tendrá su propio parque industrial.

Fue ayer al mediodía cuando dos trabajadores de seguridad de casco amarillo se enfrentaron a golpes al interior de la Siderúrgica Dos de Altos Hornos de México.

Uno pertenece a la constructora GAINCO mientras que el otro es de la constructora LZ CORPORATION, que por cierto esta última pertenece a nada más ni nada menos que al Director General de AHMSA, Luis Zamudio Miechielsen.

La constructora de Zamudio Miechielsen, se dedica a dar labores de mantenimiento en el Alto Horno 5.

La situación grave de este asunto es que uno de los inspectores de seguridad en la pelea que sostuvieron sacó una navaja y logró lesionar a su contrincante y homólogo de oficio.

Pero desafortunadamente nadie quiere decir nada, ni hablar del asunto de forma oficial, luego de que una de estas constructoras es del mismo Luis Zamudio y prefieren callar.

Otra de las cosas que sería importante cuestionar es que si también Altos Hornos de México le queda mal con los pagos a la compañía de Luis Zamudio.

Si en verdad participa en las licitaciones de obra o cómo le hacen para que gane los concursos de obra para otorgarle los contratos.

También dará moche a los supervisores de AHMSA para que les firmen los reportes de trabajo diario, les firmen estimaciones y se las aprueben las hojas de liberación en las oficinas de Supervisión de Obra.

Alguien se atreverá a hablar de este asunto, donde desde hace tiempo se habla de los beneficios que tiene las alta esferas de esta empresa.

Quien le pondrá el cascabel al gato.

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