[quote]La autoridad laboral sostuvo encuentros con empresas y trabajadores en paro[/quote]
MARCO ESCALERA/REPORTEROPersonas desestabilizadoras intentaron entorpecer las mesas de diálogo que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje entabló ayer con trabajadores y empresas a fin de llegar a una solución favorable, tras el paro de labores que iniciaron el pasado jueves en las industrias FASEMEX y ALERIS.
El Presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, Gilberto Silva González, dijo que ya iniciaron mesa de diálogo tanto con trabajadores como con las empresas, insistiendo en que existen personas interesadas en entorpecer estos diálogos y negociones.
Aunque en estas ocasión se reservó el nombre y profesión de las personas a las señaló como desestabilizadores, comentó que como autoridad laboral tiene que hacer frente entablando diálogos para lograr un buen acuerdo entre obreros y patrones.
“Evidentemente todos los trabajadores tienen derecho a expresarse, el tema es derivado de la inconformidad de algunos obreros por el reparto de utilidades provocando paros laborales en sus empresas correspondientes, pero estamos en contra de este tipo de actos”, expresó.
Durante el día de ayer mientras los trabajadores se mantenían al exterior de la JLCyA, el Presidente de esta dependencia atendía y combatía la situación a través de mesas de diálogos con el fin de solucionar de forma rápida el escenario que mantenía en paro las empresas anteriormente mencionadas.
ABOGADOS ARREMETEN CONTRA AUTORIDADES
Cabe mencionar que los abogados Cristian Ponce y Juan Iribarren que representan a estos obreros arremetieron contra las autoridades laborales, al señalar que están siempre a favor de los patrones y que ayer fueron amenazados pidiéndoles el desistimiento de sus intervenciones, a lo que respondió Silva González, que desconoce totalmente si fueron amenazados o no.
En lo que respecta a la otra acusación, fue bastante claro al señalar que existen números y resultados donde el 70 por ciento de los laudos que han resuelto han sido a favor de los trabajadores, lo cual quiere decir que es imposible que estén a favor de las empresas, ya que los números hablan por sí mismos.
