El FINANCIERO/EL TIEMPO
CIUDAD DE MÉXICO.-Sindicatos mexicanos coincidieron en que la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles al acero y aluminio ponen en riesgo los empleos que genera la industria, ya que esa medida podría obligar a las empresas a ajustar los contratos colectivos y ordenar despidos para hacer frente a los costos.
Entrevistados por El Financiero, líderes de los sindicatos más grandes del país señalaron que el gobierno debe de tomar medidas inmediatas para proteger la planta laboral en la industria, ya que se trata de empleos con calificación y con salarios de cotización que en promedio pueden van de los 400 hasta los 900 pesos diarios.
"Los despidos son una medida que las empresas pueden plantear, ahorita hay buena relación con las empresas pero sí hay un riesgo de reducir el personal tratando de justificar este arancel", sostuvo Sergio Beltrán, secretario del Interior, Exterior y Actas del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSSRM).
El dirigente del sindicato que encabeza Napoleón Gómez Urrutia, dijo que el gremio en las últimas horas ya hubo comunicación con los directivos de ArcelorMittal y Altos Hornos de México (AHMSA), "ya nos hablaron para ver qué vamos a hacer en el caso específico del acero porque exportan a Estados Unidos".
Beltrán dijo que si bien las empresas y sindicatos se reunirán para analizar las medidas arancelarias, lo primero que exige el sindicato es que el gobierno tome medidas inmediatas para proteger la estabilidad laboral de los trabajadores en las industrias del acero y aluminio que podrán ser perjudicados por la acción de los Estados Unidos.
Carlos Pavón, secretario general del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico FRENTE, consideró que la imposición de aranceles al acero y aluminio es un costo más para las empresas eso limita a la industria en su actividad operativa, lo que podría afectar el balance financiero de algunas empresas.
"Estamos en el riesgo de que las empresas sí hagan despidos, las empresas van a empezar a buscar bajar sus costos y si puede haber hasta despidos, Estados Unidos pone el arancel para que México no mande acero y eso hará que las empresas mexicanas disminuyan su exportación y sus ganancias", advirtió.
Pavón consideró que esta medida no sólo trae incertidumbre a los empleos de la industria del acero y aluminio, sino que trae mayor implicación, por ejemplo, a las fuentes de trabajo de empresas que proveen de insumos a la industria.
Tereso Medina, secretario general de la Federación Estatal de Coahuila de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), la cual tiene contratos con empresas como AHMSA y DeAcero, afirmó que los aranceles al acero, sin duda, perjudicarán la planta laboral y ponen en riesgo la conservación de los empleos.
"Los trabajadores estamos preocupados porque esta medida nos va a perjudicar, las revisiones de los contratos colectivos podrían postergarse al igual que los aumentos salariales, las empresas van a decir que no podrán competir con estas medidas porque con el arancel del 25 por ciento las empresas estarán restringidas en la venta de acero", indicó.
Javier Villarreal, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Minero Metalúrgica de la CTM, sostuvo que "se va a afectar a la industria minera en el país, habremos de revisar con las empresas la afectación, pero indudablemente sí nos va a afectar".
Consideró que esta medida arancelaria es negativa y adversa y va en contra del libre comercio, ya que no sólo serán afectados empleos de la industria acerera sino también Fuentes de trabajo de la industria automotriz, construcción, principalmente.
Tan sólo los sindicatos de los dirigentes entrevistados agrupan en su conjunto 44 mil trabajadores sindicalizados que laboran en la industria del acero, de acuerdo con los registros de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
