ABASOLO, COAH.- Luego de la quejas y denuncias públicas que una gran mayoría de habitantes del Municipio de Abasolo hiciera contra la coordinadora de Programas Sociales del Gobierno del Estado Erika Rendón Rojas en torno a la venta de bultos de cemento que se realizó sólo de maneras parcial , gente allegada al PRI y lo más relevante que gran parte de uno de los cargamentos se lo adjudicara el propietario del Ferretera Ríos, tras las acusaciones se conoció que personal interno de la dependencia estatal realizó una relación tipo auditoría entre la ciudadanía.
Tras los señalamiento varios empleado de dicha área realizaron una investigación casa por casa y cuestionando a los habitantes, fueran o no beneficiados con la venta de cemento a precio subsidiado, esto luego de darse a conocer públicamente que Erika Rendón cometió muchas irregularidades en la repartición de este beneficio, al que señalaron sólo fue para gente selecta que comulga con el partido tricolor.
Cuestionado en torno a la supuesta auditoría, el Alcalde del Municipio de Abasolo Tomas Lerma Ortiz, manifestó que se enteró por diversas personas de esta población, que andaba gente de Programas Sociales haciendo como un tipo de investigación, pero aclaró que no conoció el caso en concreto, pues a su oficina en Presidencia Municipal ninguna personas de Desarrollo Social del Estado se presentó con él para informarle algo al respecto.
Como fue del dominio público, un nutrido grupo de ciudadanos denunciaron a Erika Rendón Rojas de estar manipulando los beneficios Programas Sociales sólo para gente allegada a ella, lo peor del caso fue la acusación que se hizo que una gran parte del cargamento de cemento fue comprado por Jesús Aarón Ríos propietario de la Ferretera Ríos quien según revendería el material de construcción de 90 pesos que fue el costo beneficiario a 180 pesos que es el costo real.
