COLOMBIA.- Era un infierno… Kelly Jhoana Villamizar vivía aterrada, su pareja sentimental, Juan Esteban Salazar, la mantuvo encerrada por 90 días. “Me pegaba, me mordía, me rapó el cabello y decía que estaba loca", declaró la víctima ante autoridades en la ciudad de Ocaña.
Lo conoció en diciembre, la dulzura que había mostrado durante el inició de la relación se esfumó en un tris… "Al principio me trataba bien. Luego comenzó con las agresiones verbales, me insultaba mucho", relató Kelly, quien mostraba en el rostro las huellas de la tortura a que era sometida.
El día que llegaron elementos de la policía hasta la puerta de su domicilio, salió Juan, quien se mostró sorprendido porque acudieran hasta su domicilio, argumentando que su ‘mujer’ no estaba dispuesta debido a que había sufrido una caída de una moto.
Pese a ello, los uniformados ingresaron al domicilio para verificar el estado de salud de Kelly. Ahí estaba la mujer, sentada sobre la cama, aún bajo los efectos de una fuerte sedación, con la nariz destrozada y los ojos tan hinchados por los golpes que casi no podía ver.
"Estoy bien”, dijo; mientras su victimario se encontraba en la habitación. “Estoy bien”, reiteró a su hermana, quien le pidió salir de ese infierno.
Luego de que Juan Esteban Salazar abandonó la habitación… Kelly confesó: “El día que yo hice maletas para irme, ese fue el día que me apuñaló la mano y me cortó el cabello”.
"Fue horrible, pero gracias a la Policía y a mi hermana me rescataron de esa casa. Yo no hablaba con nadie. Me tenía prácticamente secuestrada", confesó a un noticiero local.
Aunque Salazar fue arrestado por las autoridades, se encuentra en libertad debido a que no existe una orden de captura en su contra.
