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A sus 16 años, Aidé ruega a Dios por su hija Debany de 11 meses quien padece hidrocefalia y pseudomonas
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AZUCENA TENORIO/REPORTERA
A su corta edad, Aidé Gómez sufre uno de los peores dolores, su hija Debany se debate entre la vida y la muerte; al parecer, sólo un milagro puede ayudarla, por eso, la joven madre de 16 años de edad pidió en redes sociales, una oración por su pequeña quien se encuentra hospitalizada en el IMSS
De un momento a otro, la pequeña Debany Miranda Trujillo Gómez, puede perder la vida a causa de un infarto o que su cerebro deje de funcionar, sin embargo, su madre Aidé Gómez seguirá luchando por la vida de su hija como desde hace siete meses.
Aidé Gómez, dio a luz a Debany cuando tenía ocho meses de gestación en el Hospital Amparo Pape de Benavides, donde le dijeron que la niña estaba bien y no la pusieron en la incubadora, si no que ese mismo día se les dio de alta. A los tres meses, la menor empezó a girar sus ojos, pero Aidé pensaba que era una manía que hacía.
Al ver que no dejaba de hacerlo, la lleva a San Buenaventura, pues no tenía seguro, ahí le dijeron que Debany estaba ciega, la cabeza estaba muy abultada como aguada. Al no contar con los recursos necesarios, la mandaron al Amparo Pape para realizarle un TAC, por lo que tuvo que ir con un particular ya que no funcionaba el aparato.
Fue el Seguro Popular, quien le ayudó con un viaje a Saltillo y lugar donde hospedarse, de regreso el neurocirujano del Hospital Amparo Pape hace la valoración del TAC, quien le informó el padecimiento, Debany tenía hidrocefalia.
La hidrocefalia, es una acumulación de líquido dentro del cráneo, que lleva a que se presente hinchazón del cerebro. El líquido rodea al cerebro y la médula espinal, y ayuda a amortiguar al primero.
Demasiado líquido cefalorraquídeo ejerce presión sobre el cerebro, lo cual lo empuja hacia arriba contra el cráneo y daña el tejido cerebral. Debany y su mamá Jenny comenzaron a realizar trámites y buscar una operación de urgencia para introducirle una válvula.
En Saltillo le colocaron la válvula, pero a los 15 días regresa porque la niña se vuelve a poner mal, le dicen que tiene un problema en los intestinos. Se le dio el tratamiento por dos semanas, sin embargo, los síntomas empeoraron.
Al ya contar con seguro, la tratan en la Clínica 7 del Seguro Social desde el mes de mayo, donde es difícil controlar la infección, el Neurocirujano Tijerina atendió a la menor hasta la llegada del Doctor Flores, por vacaciones.
Hace un mes, se le detectó pseudomonas por lo que se tuvo que suministrar medicamento más fuerte, incluso el Doctor Tijerina se peleaba con personal del IMSS porque no querían conseguirlo ni administrárselo, al ser un medicamento muy caro.
“Esa infección es muy rebelde a los antibióticos, es decir, entre más le administren antibióticos y que no lo acepte, se hace más grande la infección. Supuestamente ya le controlaron esa infección y ahora salen con que tiene neumococo, en ese tiempo no se lo han podido controlar”, expresó.
“A mí ya ni me conoce y está ida, también está dormida la mayoría del tiempo y la razón es porque produce más líquido que otros niños, la sonda está directo en el cerebro, así como se llena rápidamente, se baja rápido”, dijo.
Las consecuencias de la sonda, es que el cerebro deje de funcionar o que le de un infarto, pero Aidé piensa y cree en que se tienen que arriesgar aunque de un momento a otro pase lo peor. De regresar a la válvula, ocasionaría que el cerebro se le tape y todo el problema volvería a empezar.
La madre de 16 años sólo tiene el apoyo de su mamá, porque en los dos meses que tiene la menor en el hospital, su familia no ha hecho nada para ayudarla o ir a visitarla. Ella no quiere su dinero, sólo que hagan el esfuerzo de ir al hospital a darle apoyo y amor a Debany, para que ella se sienta protegida.
“El papá de Debany ya no me ha apoyado, siempre dije que me ayudaba con dinero cada fin de semana, pero tiene días que se desapareció y no me contesta el teléfono o se queda a cuidarla. El jueves creí que mi niña ya se me iba, la abracé y se quedó ida, lloré mucho”.Debany Miranda tiene 11 meses y aún no la pueden sacar adelante, sólo tiene la compañía de su mamá y su abuelita. Aunque no esperan nada de las personas, son bienvenidos los ciudadanos que quieran apoyarlos con lo que sea.
Agradeció y reconoció al personal médico del Instituto Mexicano del Seguro Social, que todos los días le dan palabras de ánimo como abrazos para darle fuerzas. Las personas que deseen ayudar a la joven pueden comunicarse al celular 8661015589, así como ayuda económica en la tarjeta saldazo.
